martes, 10 de agosto de 2010

Dos años, dos




Este, su blog preferido, cumple el día de hoy dos años de haber sido creado. Éste me ha parecido, de entrada, motivo suficiente para postear, aunque bien no tenga claro, al inicio, de qué tratará. El año pasado, hice una especie de recuento de los primeros doce meses cumplidos por el blog, y el resultado no me satisfizo mucho. Hoy, ante la misma incertidumbre, pero con el compromiso de tener que escribir algo al cumplirse dos años del blog, compartiré con mis escasos lectores algunos datos aleatorios de su autor, o sea yo, y del mismo blog, esperando no repetir el ejercicio onanista que entregué con motivo de mi cumpleaños número 26.

Olvidé por completo escribir algún post alusivo a mis 27 años de vida, cumplidos en el mes de abril. Era la perfecta oportunidad para azotarme con el tema de que ésa fue la edad a la que murieron Robert Johnson, Janis Joplin, Jim Morrison, Jimmy Hendrix y, por supuesto, Kurt Cobain. Azotarme por no haber logrado nada importante en la vida en una edad en la que estos personajes ya habían logrado trascender en el mundo de la música. Ahora que lo pienso, estuvo bien no escribir nada de esto, pues habría resultado de una rotunda hueva, un caso grave de complejo de adolescente tardío noventero. He tenido la suerte de que, a falta de prudencia, la desidia y la fiaca me han preservado de cometer actos tan penosos.

Llevo dos años prometiendo textos del maestrazo Armando Vega-Gil; espero que este tercer año que comienza el día de mañana pueda finalmente compartirles sus excepcionales relatos. También ha hecho falta publicar textos de Eusebio Ruvalcaba y Jairo Calixto Albarrán, dos titanes de La Mosca, pero también ya habrá oportunidad (si no lo he hecho, es que no quiero saturar el blog de puros fusiles). Este año, como en ningún otro, he tenido la suerte de asistir a varios toquines; espero también tener tiempo de presentar las crónicas correspondientes.

Algo que merece la mayor de las reprobaciones, fue el pasar por alto la lamentable muerte del grandioso José Saramago. No recuerdo los motivos por los que incurrí en tal omisión, tal vez sólo fue que no quise parecer un snob, un douche, un pretencioso y aprovechar el funesto acontecimiento para el lucimiento personal. Al escritor portugués, no le hacen falta mis palabras, ni éstas podían ofrecerle un homenaje digno de su obra. Y otras reflexiones pendejas sobre su ateísmo en el lecho de muerte y después de ésta me parecieron de mal gusto.

He pensado varias veces ya dejar el blog; sin embargo, aunque sea muy esporádicamente, lo retomo. Creo que hasta que no haya escrito un mínimo de mamadas y malviajes propias que siempre, narcisista como soy, he querido transmitir, no consideraré la idea de abandonarlo definitivamente. Por ahora, escribo con gusto cada vez que puedo; o más bien, cada vez que quiero, pues regularmente muchas veces puedo y sin embargo no lo hago. Definitivamente quiero retomar mi otro blog, para escribir cosas más serias, si bien desde el mismo nivel superficial que mi circunstancia personal me permite.

También debo escribir sobre mis series de televisión favoritas, y de las que odio también (como Friends, aaaggrrrrhhhhh); y sobre todo criticar, que es algo que en realidad disfruto. Creo que dejaré fuera, por el más elemental pudor, algunos otros muchos pedos internos que tengo, pues su divulgación no conduce a resultados prácticos.

Me gustaría poder tocar nuevamente la guitarra. Nunca llegué a ser muy bueno (de hecho, sólo me aprendí las más elementales canciones de Nirvana). Sin embargo, siendo realistas, creo que no podré hacerlo en el corto plazo, pues actualmente otras actividades ocupan mi tiempo. Tengo la firme esperanza de que un día podré volverme a colgar una guitarra, así sea para tocar covers de los Doors en un bar de poca monta.

Últimamente empecé a escuchar podcasts. Sí sabía de su existencia, pero nunca me llamaron la atención, pues desde el nombre, "podcast", se me hacían poner cara de fuchi, ya que se trata de una denominación excesivamente rebuscada para un simple archivo o clip de audio. Recomiendo el de Olallo Rubio (ya mucha gente lo conoce) y el de libros de Prodigy, que cuenta con la colaboración de Nicolás Alvarado. También suelo bajar el de Polo Polo, donde muy de vez en cuando puede escucharse uno que otro buen chiste.

¿Qué mas? Mmm... pues mi vida sigue siendo un poco un desmadre y comienzo a creer que así va a ser siempre. Sin embargo, paradógicamente, con todo eso, siento que ahí la llevo, que estoy mejor que muchos otros (ja, pinche consuelo) y que i'm doing just fine. He sido más positivo. Chale, hasta a veces me digo a mi mismo: go get them, tiger. Muy onda de únete a los optimistas. De hueva. Neta la desgracia, el infortunio, lo sórdido y la tragedia son más poéticos, más interesantes; el degenere, la depravación, las bajezas humanas, los vicios. Si no, pregúntenle a Bukowski.

Y bueno, ya basta de divagaciones. Ya son suficientes párrafos para un post promedio. Ya cumplí. Aquí les dejo esto que se me ocurrió la noche del día de los dos años de mi blog, algo que todavía siento muy de mí. Hace un tiempo titulé un post como "escribir por escribir", pero creo que esta entry merece más ese encabezado.

1 comentario:

Srta. Maquiavélica dijo...

oraleee felicidades por tu aniversario.. mas vale tarde q nunca jeje
besos